El Instituto de Política Familiar publicó recientemente el informe "El aborto en España, 35 años después" en el que muestran las consecuencias que su legalización ha tenido en este país desde entonces.
Entre las principales conclusiones que se reflejan en el informe se destaca que durante el año 2018 se superaron en España los 100 mil abortos, "ya que los datos actuales del Ministerio de Sanidad son incompletos, porque algunas Comunidades Autónomas no notifican los abortos químicos".
Según los datos oficiales durante ese año se produjeron 95.917 abortos registrados, pero hubo al menos 28.531 abortos químicos por lo que la cifra real total llegaría hasta los 102.498. Esto sin contar los que provoca la píldora del día de después, que se estima que al menos provoca unos 7 mil al año.
Junto con la enorme pérdida de vidas humanas, el aborto, según refleja este informe, también está ocasionando graves consecuencias económicas y sociales como es el riesgo de quiebra de las prestaciones sociales y del Estado del Bienestar.
"Si se mantiene el actual déficit de natalidad, junto con el aborto, no se regenerará la población con nuevos trabajadores que mantengan el actual sistema de pensiones. El resultado probable es la reducción o eliminación de prestaciones sociales por falta de ingresos, especialmente en temas de pensiones", revela el informe del Instituto de Política Familiar.
Además también repercutiría en la disminución de los ingresos en la Seguridad social, ya que la reducción de población por el aborto produce un descenso de la población activa y, en consecuencia, una caída de la recaudación del IRPF y de las cotizaciones de la seguridad social.