CARACAS,
Al presidir la Misa por San Sebastián, patrono de su diócesis, Mons. Mario Moronta, recordó a los venezolanos que “la Iglesia, Pueblo de Dios, se muestra como luz de las naciones y de la humanidad” en medio de las saetas del pecado.
El Obispo de San Cristóbal, pidió a los creyentes vivir en comunión “aún en medio de las diferencias y diversidad de opiniones que puedan darse entre sus filas”, porque “ha recibido el ministerio de la reconciliación, con lo que además de atraer hacia Cristo los más alejados, tiende puentes para el encuentro de todos”.
El Obispo evocó el martirio de San Sebastián, asesinado a flechazos por odio a la fe, y señaló que hoy “se siguen lanzando saetas” como “las de la violencia sin sentido, las de una legalidad violada de tantas maneras, las de una paz olvidada: por quienes quieren arreglar todo con bombas, guerras y terrorismo, la del poder arrasador del dinero, las de la fuerza invasiva de los medios de comunicación social: nueva tiranía de los tiempos actuales, las de las propuestas de carácter individualista y colectivista para arreglar nuestra sociedad”.
Según Mons. Moronta, la Iglesia con esperanza, alienta e implanta “la solidaridad y la justicia, la verdad y la libertad, la fraternidad y la concordia”.
“Hoy, más que nunca, debemos hacer sentir a todos que la Iglesia, en el Táchira y en toda Venezuela, no tiene acepción de personas, sino que sirve a todos por igual, ya que actúa en nombre de Cristo, quien dio su vida para la salvación de la humanidad”, agregó.
Mons. Moronta pidió presentar a Dios “con San Sebastián”, “el empeño por eliminar todas las saetas que hieren el ser de cada hermano”.