VATICANO,
El Papa Francisco rezó este 3 de junio por los Estados Unidos debido a los recientes disturbios sociales de violencia tras la trágica muerte de George Floyd y confió a la intercesión de la Virgen de Guadalupe, Madre de América, a quienes trabajan por la paz y la justicia.
Tras pronunciar su catequesis en italiano centrada en la oración de Abraham, el Santo Padre dirigió un mensaje particular a los fieles de lengua inglesa, quienes pudieron seguir la Audiencia General de los miércoles a través de los medios de comunicación.
En concreto, el Pontífice dijo a "los queridos hermanos y hermanas de los Estados Unidos" que sigue "con gran preocupación los dolorosos disturbios sociales que se están produciendo en su nación en estos días, tras la trágica muerte del señor George Floyd".
El Santo Padre afirmó que no es posible "tolerar ni cerrar los ojos ante ningún tipo de racismo o exclusión y pretender defender la santidad de toda vida humana".
Nada se gana con la violencia
Por ello, el Papa Francisco exhortó a reconocer que "la violencia de las últimas noches es autodestructiva y provoca autolesión. Nada se gana con la violencia y mucho se pierde", advirtió.