VATICANO,
El Papa Francisco aprobó un Motu Proprio sobre la transparencia, el control y la competencia en los procedimientos de adjudicación de contratos públicos de la Santa Sede y del Estado de la Ciudad del Vaticano, con fecha del 19 de mayo.
La finalidad de las normas promulgadas por el Motu Proprio es dotar a las autoridades vaticanas de nuevos instrumentos para prevenir malas prácticas económicas mediante la consolidación de la transparencia, el control y la competencia en los procesos de adjudicación de contratos públicos.
Entre las principales medidas novedosas se encuentra el establecimiento de un Albo (registro de operadores de economía) único informatizado para poder desarrollar actividades económicas.
También establece una serie de circunstancias que justifican que un operador económico quede excluido del Albo. De hecho, para poder participar en el Albo, hay que reunir una serie de requisitos de honorabilidad.
Asimismo, se especifica que "todos los bienes y servicios" deberán adquirirse de modo centralizado. La autoridad centralizada en ese ámbito será la Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica (para todo lo relativo a los Dicasterios de la Curia Romana y de las Instituciones administrativas de la Santa Sede), y el Governatorato del Estado de la Ciudad del Vaticano.
Además, la Secretaría para la Economía instituirá un elenco de dependientes y profesionales que puedan desempeñar funciones de peritaje y judiciales, siempre que cumplan una serie de requisitos y que carezcan de determinadas incompatibilidades.