El Administrador Diocesano del Vicariato Apostólico de Iquitos (Perú), P. Miguel Fuertes, denunció que durante las noches, cuando no hay vigilancia, extraños dañan las plantas de oxígeno que se instalaron con la ayuda de donaciones para ayudar a los enfermos de coronavirus.
Frente al desabastecimiento de recursos médicos en Iquitos, el párroco de la parroquia San Martín de Porres (Iquitos), P. Raymond Portelli; y el Administrador Diocesano del Vicariato Apostólico de Iquitos, P. Miguel Fuertes, lanzaron una campaña que recaudó en un solo día un millón de soles (cerca de 300 mil dólares) para la compra de dos plantas de oxígeno.
Este 24 de mayo, al finalizar la celebración de la Santa Misa, el P. Fuertes indicó que gracias a las donaciones, que aún continúan, se ha logrado adquirir medicinas y una tercera planta para la ciudad.
Sin embargo, lamentó que haya personas que minimicen las acciones realizadas y comenten que las plantas de oxígeno no funcionan.
"No estamos en competencia con nadie, sencillamente con el aporte de todos estamos llevando salud y vida", señaló.