Cáritas América Latina y El Caribe pidió solidaridad con la región afectada gravemente por el COVID-19, y llamó a asumir alternativas económicas sustentables, para erradicar la pobreza e inequidad.
El 14 de mayo Cáritas de América Latina y El Caribe hizo un llamado a la solidaridad con los pueblos que conforman la región, pues "en este momento de la pandemia del COVID-19" muchas familias han ampliado su situación de vulnerabilidad debido al "impacto de las medidas necesarias" impuestas por los gobiernos para "disminuir la curva de contagio".
Cáritas explicó que como innumerables familias de la región ya son pobres y afrontan exclusión, los decretos gubernamentales han mermado su acceso a necesidades básicas atendidas y a espacios que garanticen el ejercicio de sus derechos, por lo que han aumentado las situaciones de conflicto.
Estos decretos se relacionan sobre todo "con el aislamiento social, la prohibición de la circulación de los transportes públicos, el cierre de comercios o funcionamiento en horarios restrictivos de los servicios básicos, públicos y privados", señaló Cáritas.
Asimismo, Cáritas señaló otros factores que agravan la situación de riesgo de estas personas como son "la falta de información de calidad, la alta circulación de 'fake news' (noticias falsas) sobre el COVID-19, el desabastecimiento y la falta de recursos económicos para la obtención de material de higiene y el insuficiente número de agentes públicos de salud y de las redes de protección".
En su texto, la institución también reconoció el "enorme esfuerzo solidario de los servidores públicos sanitarios que están en primera línea en el cuidado de las personas, incluso a riesgo de sus propias vidas".