El Voluntariado Internacional para el Desarrollo (VIS), ONG del Instituto Religioso de Salesianos de Don Bosco, abrió un nuevo centro de emergencia para proteger del coronavirus a los niños de la calle en Luanda, capital de Angola, al sureste de África.
Sergio Pitocco, representante de VIS, explicó que este nuevo centro de emergencia se logró crear gracias a que se redirigieron algunas actividades del programa "Vamos Juntos", un proyecto financiado por la Unión Europea y otros benefactores, que tuvo por objetivo la reintegración de niños de la calle a sus familias.
Los benefactores "abrieron un nuevo centro de emergencia para ofrecer a los niños de la calle una comunidad donde vivir de forma ordenada durante este periodo, lejos de los peligros que siempre hay en la calle", señaló.
Pitocco explicó que en estos días de deconstrucción social, los niños de Angola "están más que nunca expuestos a los riesgos de la calle, a la enfermedad, al posible contagio de COVID-19, a la falta de fuentes de subsistencia y a la violencia de los adultos y a menudo, por desgracia, también de la policía".
Según informa Pitocco, muchos de los 50 niños y adolescentes, entre ellos 9 niñas y una bebé, acogidos en la casa de refugio del centro salesiano "Santo Domingo Savio" de Luanda han respondido positivamente. Solo la bebé ha sido acogida en la Casa Maria Mazzarello de las Hermanas de María Auxiliadora.
En estos centros los niños y adolescentes reciben la atención de educadores sociales y voluntarios que les brindan protección, alimentación e higiene, y sobretodo "los ayudan a organizar su vida cotidiana, a aprender y respetar las normas de higiene y prevención, y a ser responsables", señaló Pitocco.