En el día de la fiesta de Nuestra Señora de Luján, patrona de Argentina, el Arzobispo de Buenos Aires, Cardenal Mario Aurelio Poli, expresó que Ella "no habla sino que atrae con su amor".
Al comenzar la jornada el Cardenal Poli celebró una Misa a puerta cerrada en la Catedral de Buenos Aires, y en su homilía recordó también los 400 años de vida de la Arquidiócesis de la Santísima Trinidad de Buenos Aires.
"Cuando celebramos esta fiesta hermosa de la Virgen de Luján, recordamos su presencia" y el milagro de su aparición en tierras argentinas "es su atracción amorosa", dijo el Cardenal Poli.
"Ella tomó muy en serio lo que, al pie de la cruz, le encargó su hijo amado. Ella atrae a su santuario a millones y millones de personas por año". "Los muros del bello templo de Luján, donde todos nos sentimos como en casa, hablan de silenciosos corazones, de historias de conversión, de cambios de vida, de reconciliación", describió.
El Cardenal Poli recordó el relato de que habla del Siervo de Dios Manuel Costa de los Ríos, conocido como el Negro Manuel, un esclavo que llegó desde Brasil para ser comercializado en Buenos Aires.
Manuel fue quien cuidó de la imagen mariana con mucha dedicación en la estancia de su amo Antonio Farías de Saá hasta su muerte.