Chen Guangcheng, un activista ciego de derechos humanos que vive asilado en Estados Unidos desde 2012, afirmó que el Partido Comunista Chino es el virus más grave de todos, durante un foro realizado en la Catholic University of America sobre la actual pandemia del coronavirus.
"Es hora de reconocer la amenaza que significa el Partido Comunista Chino para toda la humanidad. Este mantiene y manipula información para fortalecer su poder, sin importarle el costo en vidas humanas", dijo Guangcheng el 24 de abril en el foro organizado por la institución Faith & Law junto con el Instituto de Ecología Humana de la Catholic University of America en Washington D.C.
Antes de vivir en Estados Unidos, Chen Guangcheng fue enviado a prisión y estuvo en arresto domiciliario en China. Denunció además que él y su familia fueron golpeados en varias ocasiones y se les negó el tratamiento médico. Fue encarcelado por haber criticado en repetidas ocasiones al Partido Comunista por abusos contra los derechos humanos, incluida la política del hijo único que generó, entre otras cosas, una masiva cantidad de abortos en el país.
Sobre la cuarentena de Wuhan, la ciudad epicentro de la pandemia del coronavirus, Guangcheng denunció que "familias enteras han sido halladas muertas en sus departamentos porque no se les permitió salir" para pedir ayuda. Además, dijo, no es cierto que el coronavirus esté bajo control y existe aún cuarentena en lugares como la ciudad de Harbin.
En su opinión, el resurgimiento del virus "está directamente relacionado con el hecho de que el Partido esconde la verdad y se dedica a 'romper' a las personas que intentan compartir información sobre el coronavirus".
También alertó que el Partido Comunista Chino usa la crisis causada por la pandemia para perseguir a los disidentes y detenerlos en "lugares de cuarentena", como el caso de un abogado cuya esposa denuncia que él ha sido puesto bajo arresto a 400 kilómetros de donde ellos viven, arguyendo que la detención es para controlar la enfermedad.