VATICANO,
El Papa Francisco pidió oraciones por la unidad, fraterna entre las naciones, en particular por la unidad de Europa para que recuerden los sueños de "los padres fundadores de la Unión Europea".
"En este tiempo en el cual es tan necesaria la unidad -entre nosotros, entre las naciones- rezamos hoy por Europa, para que Europa consiga tener esta unidad, esta unidad fraterna, que han soñado los padres fundadores de la Unión Europea"
Luego, el Papa Francisco en su homilía comentó una parte de la narración bíblica del Evangelio de San Juan al capítulo 3 que describe el diálogo de Jesús con Nicodemo, narración que calificó como un "tratado de Teología" que contiene el kerigma, la catequesis, entre otros temas.
En esta línea, el Santo Padre destacó dos cuestiones: la importancia del Amor de Dios y de la Luz que proviene de Jesús, del Espíritu Santo.
Por ello, el Pontífice recomendó mirar en silencio el crucifijo "que no es un objeto para poner aquí o allá, sino la expresión del Amor de Dios". "Mirar el crucifijo, el Amor de Dios, la sabiduría cristiana", alentó el Papa.
Tras reflexionar en el Amor de Dios y en el crucifijo, el Santo Padre invitó a cuestionarse si el camino que se sigue está en la Luz o en las tinieblas: "¿Soy hijo de Dios o he terminado por ser un pobre murciélago?", advirtió el Papa.