El pasado 12 de febrero se admitió en el Congreso de los Diputados el proyecto de ley para la regularización de la eutanasia en España. Una ley que siempre ha sido prioritaria para el gobierno formado por la coalición entre PSOE y Podemos.
A pesar del estado de alarma en el que se encuentra España desde el pasado 15 de marzo, el Congreso de los Diputados mantiene una actividad mínima que incluye en su calendario a la ley de la eutanasia, prevista para ser aprobada cuanto antes.
El viernes 17 de abril se cumplía el plazo para la presentación de enmiendas parciales por parte de los grupos políticos. Algo que el PSOE ha decidido ampliar hasta el 22 de abril, lo que implica que pretenden seguir adelante con la tramitación de este texto.
Mientras tanto en España, el país de Europa más afectado por el coronavirus, desde el inicio de la pandemia han fallecido unas 21 mil personas.
Alicia Latorre, presidente de la Federación Española de Asociaciones Provida de España envió un comunicado en el que califica de "especialmente perverso" el hecho de que el Gobierno esté preparando "una ley de eutanasia en estos momentos en que España está sumida en un profundo dolor por la muerte de miles de personas y el abandono de tantos ancianos y discapacitados, considerados vidas de segunda".
"Es una frialdad y maldad inaceptable no reaccionar a favor de toda vida humana viendo el trabajo heroico de tantas personas que arriesgan y entregan literalmente su vida con la impotencia de no poder llegar a todos, de que faltan recursos y que tantos mueran solos sin tener lo que su dignidad merece", afirma Latorre.