Mons. Amadeo Rodríguez Magro, Obispo de Jaén (España) presidió la Misa Crismal el pasado martes santo en el seminario diocesano y antes de terminar animó a los sacerdotes a tener "un gesto de generosidad con las víctimas sociales de esta pandemia", les propuso donar su sueldo de un mes a Cáritas, algo que él mismo ya ha hecho para contribuir al alivio de los más pobres y necesitados.
En la homilía de la Misa Crismal, el Obispo explicó que esta celebración "tiene, por el conjunto de sus ritos, una fuerte impregnación eclesial".
Mons. Rodríguez Magro recordó que en esta Eucaristía "habitualmente y en circunstancias normales, los sacerdotes renuevan y actualizan las promesas sacerdotales", pero sin embargo en esta ocasión no lo pueden hacer "de una forma presencial".
"De cualquier modo, estoy seguro de que cada sacerdote lo va a hacer desde lo más íntimo de su corazón y también estoy convencido de que quizás muchos lo hagan con una convicción especial", aseguró.
Mons. Rodríguez Magro destacó "la capacidad solidaria de los fieles" en esta situación "obligada y necesaria de confinamiento en la que todos estamos y que está poniendo a prueba la capacidad de todos para sacar lo mejor de nosotros mismos y ponerlo al servicio de los demás".
"Es maravilloso ver cómo se multiplican las iniciativas solidarias para ayudarnos unos a otros material y moralmente", aseguró.