La Diócesis de Río Gallegos celebrará el próximo 1 de abril los 500 años de la primera Misa en territorio argentino y, debido a las medidas dictadas para evitar el contagio de coronavirus, los fieles participarán en forma espiritual a través de un gesto significativo para el altar.
El 12 de marzo el Obispo de Río Gallegos, Mons. Jorge García Cuerva, anunció la suspensión de las actividades celebrativas previstas para los días 31 de marzo, 1 y 2 de abril.
De esta forma la comunidad diocesana, comprendida por las provincias de Santa Cruz y Tierra del Fuego, se unían a las disposiciones preventivas de las autoridades para resguardar a la población del contagio del coronavirus.
La comisión general de los 500 años explicó a ACI Prensa que el tiempo previo a la celebración estuvo marcado por una "fuerte preparación tanto desde la organización, como desde la oración".
"Hemos realizado un gran trabajo en equipo y en comunidad, para que esta celebración y encuentro fuera un 'nuevo pentecostés' desde la Evangelización y la comunión fraterna".
"El tiempo de cuarentena debido a la pandemia de coronavirus lo transfiguró más aún, en un tiempo de profunda oración y gestos de solidaridad hacia quienes necesitan más en estos días".