REDACCION CENTRAL,
Varias agencias de noticias, incluida la Agencia Alemana de Prensa (DPA), informaron en los últimos días que una mártir de la tradición cristiana primitiva llamada "Corona" fue venerada en el pasado como la santa patrona contra las epidemias resistentes.
Se dice que Santa Corona, de 16 años, fue ejecutada en el siglo II por profesar su fe en Oriente, probablemente en Siria. Sus reliquias se han mantenido en la ciudad de Aquisgrán, en el oeste de Alemania, durante más de 1.000 años, más precisamente, desde el 997 d.C.
Daniela Lövenich, la portavoz de la Catedral de Aquisgrán, declaró a DPA: "Entre otras cosas, Santa Corona es considerada una santa patrona contra las epidemias. Eso es lo que la hace tan interesante en este momento".
El miércoles 25 de marzo, la agencia Reuters publicó un artículo en el que se informó que la Catedral de Aquisgrán ha decidido sacar las reliquias de la poco conocida Santa Corona para exhibirlas una vez que haya pasado la pandemia del coronavirus, como parte de una exposición sobre artesanía de oro.
Actualmente los expertos están limpiando minuciosamente el relicario de oro, bronce y marfil, que ha estado oculto a la vista del público durante los últimos 25 años.
Brigitta Falk, jefa del Tesoro de la Catedral de Aquisgrán, contó detalles sobre la leyenda del brutal martirio de Santa Corona. Se dice que la joven cristiana fue atada a dos palmeras curvas que finalmente destrozaron a la niña cuando éstas se abrieron nuevamente.