VATICANO,
El Papa Francisco pidió que este tiempo de Cuaresma sea un tiempo oportuno para acercarnos al Señor y pedir su misericordia.
"Que la Cuaresma que estamos viviendo sea tiempo oportuno y precioso para acercarnos al Señor, pidiendo su misericordia, en las diversas formas que la Madre Iglesia nos propone", indicó el Pontífice antes del rezo del Ángelus de este domingo 22 de marzo.
Al comentar el pasaje del Evangelio de San Juan de la liturgia de este cuarto Domingo de Cuaresma que relata la curación de Jesús a un ciego de nacimiento, el Papa afirmó que "cada uno de nosotros está llamado a recibir la luz divina para manifestarla con toda la propia vida".
Además, el Santo Padre recordó la afirmación de Jesús "yo soy la luz del mundo" para añadir que Cristo es "la luz que aclara nuestras tinieblas".