Debido a la pandemia COVID-19, la Marcha Nacional por la Vida en Colombia se aplazará al 22 de agosto del 2020, sin embargo, los líderes provida aseguraron que estarán alertas a la emisión de la reglamentación del aborto que dé el Gobierno.
La organización declaró en un comunicado que "en coherencia con nuestra misión principal de cuidar y salvar toda vida humana", que implica "ser más responsables, solidarios y cuidadosos" con ellos mismos y su entorno, acatarán las decisiones tomadas por el Gobierno de Colombia.
Sin embargo, advirtieron que seguirán trabajando y estarán en alerta, pues "el ministro de Salud está pendiente de emitir la reglamentación sobre el aborto, que varios magistrados de la Corte Constitucional, no solo quieren mantener, sino ampliar las sentencias de despenalización del aborto".
Asimismo, denunciaron que el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) "y otras entidades del Estado dedican tiempo al negocio del aborto, en lugar de centrar todos sus esfuerzos en combatir graves problemas y enfermedades que asolan al país como el hambre, el dengue o incluso el coronavirus (COVID-19)".
"Aplazamos la marcha, pero seguimos trabajando y luchando para acabar con el negocio del aborto, que no parará, ni siquiera en tiempos de crisis", porque "defendemos y cuidamos la vida de todos".
La organización manifestó que la "Ola Celeste en Colombia seguirá eligiendo las 2 vidas", y se comprometieron a seguir "apoyando a las mujeres que enfrentan un embarazo en crisis e inesperado".