VATICANO,
El Vicario del Papa para la diócesis de Roma, Cardenal Angelo de Donatis, promulgó un nuevo decreto con fecha del 13 de marzo en el que estipula que las iglesias parroquiales de Roma podrán permanecer abiertas tras el anuncio del día anterior que había estipulado el cierre de las parroquias y otras iglesias en Roma.
Sin embargo, las iglesias no parroquiales de toda la diócesis permanecerán cerradas, así como también todas las actividades pastorales y las Misas públicas seguirán suspendidas hasta el 3 de abril.
Desde el 9 de marzo, todas las Misas públicas de la diócesis habían sido canceladas, pero las iglesias habían permanecido abiertas para la oración personal y en algunos casos con Adoración eucarística y con la administración del Sacramento de la Confesión.
El Cardenal De Donatis señaló el 12 de marzo que esa disposición "es para el bien común" por lo que invitó a recibir "la Palabra de Dios que nos dice: donde dos o tres están reunidos en mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos" por lo que invitó "en este tiempo, aún más que antes, nuestros hogares deben ser iglesias domésticas".
El decreto de cerrar las iglesias en Roma se produjo un día después de que el Primer Ministro de Italia, Giuseppe Conte, endureciera las restricciones del bloqueo nacional hasta el 3 de abril para frenar la propagación de la pandemia del coronavirus por lo que se incluyó el cierre de todos los restaurantes, bares y tiendas que no sean supermercados u otros mercados de alimentos.