En un comunicado, la Conferencia Episcopal Paraguaya (CEP) ha exonerado a los fieles de asistir a las Misas de precepto dominicales del 15 y 22 de marzo, como una de sus medidas para evitar la propagación del coronavirus.
Los obispos paraguayos señalaron que comparten la preocupación por la salud de la población y la "responsabilidad de velar por la vida y el bienestar de nuestros hermanos", frente a la propagación del nuevo coronavirus COVID-19.
Paraguay cuenta con cinco casos de infección del virus, una enfermedad que se reportó por primera vez en la ciudad de Wuhan (China) y ha afectado hasta el momento a más de 125 mil personas, con más de cuatro mil muertos y 66 mil recuperados.
Los prelados resaltaron que sería "negligente e imprudente" no realizar acciones para evitar la propagación de un virus agresivo, en especial al considerar la "vulnerabilidad de un sector importante de la población y la escasez de recursos hospitalarios para dar asistencia respiratoria con el tratamiento adecuado a una población numerosa".
La CEP indicó que, siguiendo las medidas establecidas por el Gobierno Nacional, disponen "que todas las actividades pastorales grupales sean postergadas hasta el final de las medidas sanitarias declaradas por el Ministerio de la Salud Pública y Bienestar Social".
Todas las reuniones que impliquen la congregación de muchas personas deben programarse para una fecha posterior, y "los fieles quedan dispensados del precepto dominical de los domingos 15 y 22 de marzo", afirmó.