VATICANO,
El Papa Francisco recordó nuevamente la crisis humanitaria en Siria y pidió oraciones "por los olvidados" de la ciudad Idlib, localizada al noroeste del país.
Así lo indicó el Santo Padre al presidir el rezo del Ángelus de este domingo 8 de marzo, que presidió por primera vez desde la biblioteca, y no desde la ventana, del Palacio Apostólico Vaticano como medida cautelar para evitar aglomeraciones de los fieles que suelen acudir a esta cita en la Plaza de San Pedro ante la epidemia del coronavirus en Italia.
En primer lugar, el Pontífice afirmó que era "un poco extraña la oración del Ángelus de hoy, con el Papa 'enjaulado' en la biblioteca" y dijo que veía a las personas presentes en la Plaza de San Pedro.
"Quisiera comenzar agradeciendo aquel grupo -presente en la Plaza- que manifiesta y lucha 'por los olvidados de Idlib'. ¡Gracias! ¡Gracias por lo que hacen!", exclamó el Papa.
Tras reflexionar en el Evangelio de este segundo Domingo de Cuaresma que relata la Transfiguración de Jesús, el Santo Padre volvió a saludar a "las asociaciones y grupos comprometidos en solidaridad con el pueblo sirio y especialmente con los habitantes de la ciudad de Idlib y del noroeste de Siria" quienes son obligados a "huir por los desarrollos recientes de la guerra" y agregó: "los estoy viendo aquí" señalando un monitor.
En esta línea, el Santo Padre expresó: "renuevo mi gran aprensión, mi dolor por esta situación inhumana de estas personas indefensas, entre los cuales muchos niños, que están arriesgando sus vidas".