El presidente de Argentina, Alberto Fernández, anunció el 1 de marzo que enviará en un plazo máximo de diez días el proyecto de ley de legalización de aborto en Argentina, medida que ha causado amplio rechazo en la sociedad.
Durante el discurso de apertura del año legislativo del Congreso de la Nación, Fernández dijo que el Poder Ejecutivo ingresará un proyecto de legalización del aborto, que además contendrá un plan de educación sexual y un programa de asistencia para madres embarazadas hasta los dos años de vida del niño.
Según Fernández "la legislación vigente en materia de aborto no es efectiva" porque penaliza a las mujeres desde 1921.
Para Fernández, dado lo anterior, la sociedad "debe respetar a sus miembros a disponer libremente de sus cuerpos".
Al respecto, la primera encuesta en Twitter tras el anuncio arrojó que solo un 30% de los votantes está a favor del aborto, mientras que un 70% lo rechaza. Además se viralizó el hashtag #AbortoEsGrieta.
Para el grupo San Juan sí a la vida, "el aborto es grieta porque divide a la sociedad y usa este tema como cortina de humo para tapar los problemas reales como la pobreza".