Una delegación de los Caballeros de Colón está en peregrinación en Roma para celebrar los 100 años de sus importantes obras de caridad en la Ciudad Eterna.
Los Caballeros de Colón, una de las organizaciones laicales más grandes del mundo con casi dos millones de miembros, han servido en Roma durante nueve pontificados y una guerra mundial.
En una conferencia de prensa realizada el 11 de febrero, el Caballero Supremo, Carl Anderson, recordó que la presencia de la organización se inició en 1920 y destacó que "nuestro lema era todos son bienvenidos y todo es gratis".
La primera obra de los Caballeros, que fueron invitados a Roma por el Papa Benedicto XV, fue la construcción de campos de juego que ahora se han convertido en lugares deportivos para jóvenes, dijo Anderson. Durante la Segunda Guerra Mundial estos espacios se convirtieron en centros de distribución de ayuda humanitaria.
Otras obras en el Vaticano fueron la donación del terreno donde se construyó el Aula Pablo VI y la restauración de varios lugares y piezas como la fachada de la Basílica de San Pedro y las estatuas de San Pedro y San Pablo en la plaza.
Los Caballeros de Colón también asistieron económicamente a Radio Vaticana en la década de 1960 y financiaron un satélite para las transmisiones de los eventos y misas del Papa.