Líderes católicos en Filipinas expresaron su preocupación porque el proyecto de ley que busca legalizar el divorcio está avanzando sin un debate significativo.
La comisión de Población y Relaciones Familiares de la Cámara de Representantes aprobó los proyectos de ley 100, 838 y 2263 el 5 de febrero, que permitirían el divorcio en el país. Estos se consolidarán antes de recibir la totalidad de los votos de la Cámara.
Un esfuerzo similar por legalizar el divorcio en sesiones previas del Congreso pasó a la Cámara, pero fue rechazado en el Senado.
Según la agencia vaticana Fides, parece haber un consenso general de las fuerzas políticas en torno al tema. Frente a lo cual, los líderes católicos de Filipinas se pronunciaron en oposición.
"Esperaba que las discusiones y deliberaciones exhaustivas estén a la altura", dijo el P. Jerome Secillano, secretario ejecutivo de Relaciones Públicas de la Conferencia de Obispos Católicos de Filipinas (CBCP). "Me sorprendió la velocidad en la que el comité aceptó el proyecto de ley", dijo el P. Secillano a UCA News.
Filipinas es el único país en el mundo, además de la Ciudad del Vaticano, donde el divorcio no es legal, reportó CNN. Más del 80% de la población de filipinas es católica.