VATICANO,
El Papa Francisco subrayó la necesidad de desarrollar una nueva cultura sanitaria que ponga el acento en la persona sin mirar "al componente económico-financiero" y que contribuya a "humanizar la medicina y la realidad hospitalaria y sanitaria".
El Santo Padre recibió este sábado 1 de febrero en el Vaticano a trabajadores, directivos y personal sanitario (médicos y enfermeros) del grupo sanitario italiano Villa Maria, activo desde hace 40 años, y que ha traspasado las fronteras italianas ofreciendo servicios sanitarios en otros países.
En su discurso, el Pontífice dijo que "el enfermo no es un número, es una persona que necesita humanidad".
Puso de relieve "la evolución tecnológica y los cambios de naturaleza social, económica y política" que "han cambiado el tejido sobre el que se sustenta la vida de los hospitales y de las estructuras sanitarias".
Esa evolución y esos cambios es lo que justifica "la necesidad de una nueva cultura, especialmente en la preparación técnica y moral de los trabajadores sanitarios en todos los niveles".
"Acudir al encuentro de las exigencias de los pacientes y de sus familias, obligados, con frecuencia, a migrar a centros especializados alejados de su propio territorio" es una de las prioridades del Grupo Villa Maria que el Papa citó como ejemplo de ese cambio cultural.