El próximo 25 de enero el Centro de Psicología Católico Areté cumplirá ocho años de fundación y su director, Humberto Del Castillo Drago, agradeció a Dios por este tiempo y señaló que esperan seguir creciendo para formar a más profesionales en la psicoterapia de la reconciliación.
En una entrevista, Del Castillo explicó que Areté nace de la "gran necesidad que tenían las personas de ser escuchadas y ayudadas a resolver distintos problemas psicológicos y psiquiátricos", y de una respuesta a la "psicología contemporánea", que busca la respuesta en el hombre, "sin Dios, sin fe".
Junto con algunos amigos, Del Castillo empezó a organizar talleres de reflexión, grupos de estudio, seminarios de formación, "todo con la idea de estudiar, reflexionar y plantear los fundamentos de una psicología y psicoterapia católica".
"Luego de varios años, todo ello nos fue llevando a la convicción de que Dios quería que nos lancemos a la aventura de conformar el primer Centro de Psicología Católico, desde donde se trabaje en una propuesta de psicoterapia católica", agregó.
Del Castillo señaló que estos ocho años han sido una obra de Dios, un centro que el Señor formó para ayudar a las personas con una psicología integral y católica, "que colabore con las personas a que acogen en sus vidas el don de la reconciliación y vivan la virtud en su cotidianidad".
Una gran bendición para Areté en este tiempo es poder ayudar a los distintos usuarios "a recuperar la esperanza de tener un auténtico sentido de vida y la fe en una vida plena y virtuosa", señaló.