Los obispos de Filipinas pidieron oraciones y ayuda para los afectados por la erupción del volcán Taal, que ha provocado la evacuación de miles de personas de la zona afectada.
El Arzobispo de Lipa, Mons. Gilbert Garcera, explicó a Radio Veritas que "además de las oraciones pedimos ayuda con donaciones en dinero o en especie para la tarea de solidaridad de la Arquidiócesis" que ha abierto las puertas de sus parroquias para acoger a los desplazados, que se calcula aproximadamente en tres mil.
Según refiere Vatican News en inglés, el seminario de la Sociedad del Verbo Divino y otras instituciones religiosas también están acogiendo desplazados en la ciudad de Tagaytay, que necesitan alimentos, medicinas, útiles de aseo y combustible.
"Rezamos por la seguridad de la gente en las zonas cercanas al volcán Taal", dijo por su parte Mons. Paolo Virgilio David, Obispo de Kalookan y vicepresidente de la Conferencia de Obispos Católicos de Filipinas.
El Taal es uno de los volcanes más activos de Filipinas y está ubicado a unos 70 kilómetros al sur de la capital, Manila. En los últimos días ha arrojado cenizas hasta unos 15 kilómetros de distancia, generando la evacuación de pueblos enteros ante una posible erupción mayor, la cancelación de vuelos, la alerta general y la alarma ante un posible tsunami volcánico en el lago Taal.
El lunes 13 de enero se pudo apreciar lava saliendo del cráter del volcán, mientras que el cielo estaba oscuro por las cenizas y el humo.