TEHERÁN,
Peter Burns, director de relaciones gubernamentales y política de la ONG de defensa de los derechos humanos, In Defense of Christians, señaló que están monitoreando que los cristianos y otras minorías no sean atacadas en Medio Oriente como consecuencia de la muerte del general iraní Qasem Soleimani.
En una reciente entrevista, Burns indicó que existe preocupación de que la región se vuelva inestable, lo que podría significar "una mayor probabilidad de contraataques contra las minorías religiosas".
"In Defense of Christians está monitoreando de cerca la situación para asegurar que tales ataques no ocurran", aseguró.
"El general Soleimani y su Fuerza Quds causaron estragos en cristianos y otros en Irak, Irán, Líbano y Siria durante décadas", dijo Burns. En ese sentido, indicó que su fallecimiento "marcará el final de una era de terrorismo e inestabilidad".
Qasem Soleimani, líder de la Fuerza Quds, una unidad de los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Islámica iraní, fue asesinado en un ataque aéreo el 3 de enero en el Aeropuerto Internacional de Bagdad por orden del presidente estadounidense Donald Trump. También murieron Abu Mahdi al-Muhandis, el líder de las Fuerzas de Movilización Popular, y la milicia iraquí que luchó contra el Estado Islámico (ISIS).
La operación aérea siguió a un ataque contra la embajada de Estados Unidos en Bagdad, y los funcionarios estadounidenses afirman que Soleimani había planeado atentados adicionales contra los estadounidenses.