VATICANO,
El Papa Francisco negó que San José sea un personaje evangélico de segundo plano y afirmó que en él se concentra toda la sabiduría cristiana.
Así lo afirmó durante el rezo del Ángelus dominical este 22 de diciembre, cuarto y último domingo de Adviento, desde los apartamentos pontificios del Palacio Apostólico del Vaticano.
"El Evangelio nos guía hacia la Navidad por medio de la experiencia de José, de San José, una figura aparentemente en segundo plano, pero en cuya actitud se concentra toda la sabiduría cristiana", subrayó Francisco.
Destacó que San José "junto con Juan Bautista y María, es uno de los personajes que la liturgia nos propone para el tiempo de Adviento; y de los tres, es el más modesto. No predica, no habla, pero trata de cumplir la voluntad de Dios; y la cumple en el estilo del Evangelio y de las Bienaventuranzas: 'Bienaventurados los pobres de espíritu, porque de ellos es el Reino de los Cielos".
El Pontífice señaló que "José es pobre porque vive de los esencial, trabaja, vive del trabajo, es la pobreza típica de aquellos que son conscientes de depender en todo de Dios y en Él sitúan toda su confianza".
A continuación, el Papa Francisco explicó el significado del fragmento evangélico de este domingo, en el que San José descubre que María está embarazada y decide repudiarla en secreto para evitar que la juzguen.