El Obispo Emérito de Rancagua (Chile), Mons. Alejandro Goic, se pronunció sobre el caso La Cofradía que involucró a 14 sacerdotes en una supuesta red de abusos sexuales, pero que al final culminará sin imputados ante la justicia civil.
El caso denominado inicialmente La Familia, y luego La Cofradía, comenzó a ser investigado por la justicia civil y canónica en mayo de 2018, luego de un reportaje en Canal 13 en el que Elisa Fernández, quien por 14 años fue coordinadora de pastoral juvenil en la diócesis de Rancagua, denunció la existencia de un grupo organizado de párrocos que habrían incurrido en conductas sexuales impropias y eventuales abusos.
A fines de noviembre de este año la Fiscalía Metropolitana Norte decidió "no perseverar" en la investigación contra los dos últimos sacerdotes vinculados. El abogado de la Unidad de Estudios de la Defensoría Penal Pública de O'Higgins, Cristián Miranda, dijo a Radio Cooperativa que luego de "una larga investigación" no se estableció "que existía una organización criminal de carácter jerarquizada, destinada a cometer delitos de connotación sexual" por lo que se cerrará el caso el próximo 12 de diciembre.
Respecto al proceso judicial, Mons. Goic, de 79 años, dijo al diario La Tercera que la "decisión de la fiscalía ayuda en el propósito de verdad y justicia. Ya en septiembre del año pasado la Defensoría Penal Pública llegó a la convicción de que esta llamada Cofradía no existía como la supuesta asociación ilícita que se presentó, con gran difusión".
"Sin embargo, debo reconocer que a partir de esta denuncia se gatilló el esclarecimiento de algunas situaciones graves que, conforme al Derecho Canónico, son incompatibles con el ejercicio del sacerdocio", aseguró Mons. Goic, que luego de la denuncia televisiva renunció al cargo de presidente del Consejo Nacional de Prevención de abusos y acompañamiento de víctimas en Chile.