CIUDAD DE MÉXICO,
El polémico sacerdote Alejandro Solalinde, que meses atrás aseguraba que la Iglesia Católica necesita "una mujer Papa joven" se distanció de la ayuda a los migrantes, que ha caracterizado su ministerio, y aseguró que "la prioridad es México".
Entrevistado recientemente por el sitio web salvadoreño El Faro, el P. Solalinde defendió al presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, y sus controvertidas medidas para frenar el paso de inmigrantes que llegan desde Centroamérica, como la de destinar miles de agentes de la Guardia Nacional al sur del país.
Cuestionado sobre si ha cambiado desde hace una década, cuando según su entrevistador el sacerdote "era muy pobre, durmiendo en una colchoneta, o en aquel carrito que tenías", y poseía un "compromiso inquebrantable con los migrantes centroamericanos" el P. Solalinde dijo que "he cambiado porque la vida cambia y hay que seguir a los migrantes de otra manera".
Tras confirmar que ha depositado su confianza en López Obrador, a quien asesoró durante su campaña presidencial, el P. Solalinde dijo que actualmente caminar con los migrantes "ya no significa subirme a los trenes ni siquiera esperarlos en el albergue. Están llegando muy pocos. Los migrantes ya están en otro lado. Las cosas cambiaron".
El P. Solalinde es conocido en México tanto por su trabajo con migrantes como por las polémicas en las que ha estado envuelto.
En una entrevista con la revista pornográfica Playboy en 2012, el P. Solalinde se definió como "descendiente" de la teología de la liberación, y calificó de un "milagro" y "algo maravilloso" haber tenido relaciones sexuales con una mujer a los cuatro años de haber sido ordenado sacerdote.