ROMA,
Mons. Andrew Nkea, Obispo de Mamfe (Camerún), denunció repetidos secuestros en Ejagham, en el área central de su diócesis, como represalia por su participación en un diálogo nacional que busca la paz entre el gobierno del país y grupos rebeldes.
En una carta dirigida a los fieles de su diócesis, a la que tuvo acceso la fundación pontificia Ayuda a la Iglesia Necesitada (ACN, por sus siglas en inglés), y titulada "No levantes tu mano contra el Ungido de Yahweh", el Prelado africano condenó los secuestros y las extorsiones realizadas por las llamadas "Fuerzas de Restauración de Ambazonia".
En un conflicto que se remonta a los tiempos de colonialismo europeo en Camerún, grupos autodenominados "anglófonos", por hablar inglés y haber sido colonia del Reino Unido, buscan una separación del resto del país.
El conflicto, que ya tiene décadas, ha llevado al establecimiento de un "Gran Diálogo Nacional" en Yaundé, la capital del país, en el que participa Mons. Nkea.
En su carta, el Obispo de Mamfe recordó diversos casos de violencia contra sacerdotes ocurridos en las últimas semanas, como el secuestro del P. Felix Sunday a manos de las Fuerzas de Restauración de Ambazonia cuando acababa de celebrar la misa en una capilla de la misión y regresaba para celebrar una segunda misa en la localidad de Afap.
Otros dos sacerdotes cameruneses lograron escapar de emboscadas que buscaban secuestrarlo. En los primeros días de noviembre, un grupo de hombres armados ingresaron a una parroquia y exigieron al sacerdote y a los fieles reunidos ahí un millón de francos CFA (cerca de 1.700 dólares).