Los obispos de la Conferencia Episcopal de Bolivia (CEB) hicieron un enérgico llamado a detener la violencia y la muerte en el país, al cumplirse un mes de protestas por el supuesto fraude electoral del expresidente Evo Morales, cuyos partidarios ahora en lugares como El Alto están sembrando el caos entre la población.
En un comunicado titulado "Espiral de violencia y muerte", los obispos se manifestaron "ante la espiral de irracionalidad y de violencia que crece y que se ha cobrado ya numerosos muertos y heridos, cubriendo de luto a la comunidad boliviana". Ante esta situación "se solidarizan con sus familiares y elevan oraciones por su eterno descanso y la recuperación de los heridos".
"Condenamos la violencia, venga de donde venga. Recordamos una vez más que es irracional e irresponsable y no es solución para los conflictos entre seres humanos. Alzamos la voz para pedir a todos: ¡Basta ya de muerte! ¡Basta ya de violencia! ¡Basta ya de sufrimiento y dolor!", clamaron.
Los prelados bolivianos pidieron "a los grupos que se movilizan para expresar sus demandas les exhortamos a mantener actitudes pacíficas" y "a las fuerzas del orden las llamamos a no usar la fuerza de manera desmedida en el cumplimiento de su deber de resguardar la vida de los hermanos y los bienes de la comunidad".
"A quienes tienen en sus manos el poder y la capacidad para detener todo eso: no llamen a la confrontación y violencia, salgan de su boca palabras de paz y reconciliación", resaltaron.
"Seamos todos constructores de paz y pidamos al Dios de la vida, que nunca quiere la muerte de los hermanos, inspire nuestro corazón y nuestra mente, para recorrer caminos de paz entre todos los bolivianos", concluyeron.