En el marco de la visita del Papa a Tailandia, Marianne Philibert, misionera francesa que vive en Bangkok desde el 2013, resalta que el viaje del Santo Padre al país asiático será un fortalecimiento de la fe para los católicos, en una sociedad tolerante pero mayoritariamente budista.
Marianne comentó en una entrevista a ACI Prensa, que ella pertenece a la comunidad "Puntos Corazón", un movimiento misionero católico que ofrece a los jóvenes una misión de uno o dos años al servicio de los que más sufren.
"Tenemos un 'ministerio de presencia': estar aquí, entre ellos y con ellos. Para entrar en la cultura tailandesa, compartir la misma vida diaria, hablar tailandés, cocinar comida tailandesa", resaltó Marianne.
El grupo de misioneras se ubica en Jet Sip Raj, un área privada en Bangkok (Tailandia). Son cuatro mujeres de diferentes nacionalidades (Polonia, Vietnam, Filipinas y Francia), que dedican su vida a orar y ofrecer su amistad a los tailandeses. Marianne comentó que su casa es una "pequeña casa de oración, bendecida por la presencia del Sagrado Sacramento, y cada una lleva una hora de adoración diaria".
Créditos: Movimiento "Puntos Corazón"