VATICANO,
Con motivo de la apertura del segundo periodo ordinario de sesiones del Programa Mundial de Alimentos, el Papa Francisco dirigió un mensaje al presidente del Programa en el que pidió un mayor compromiso de gobiernos, organismos internacionales y personas individuales en la lucha contra el desperdicio de alimentos.
El Santo Padre reflexionó en su mensaje sobre la "paradoja de la abundancia" que lleva a que "en muchos lugares, hermanos nuestros no pueden alimentarse ni sana ni suficientemente, mientras que en otros se malgasta y se derrocha sin control".
Esa paradoja de la abundancia, expresión acuñada por San Juan Pablo II, "sigue siendo un obstáculo para resolver el problema de la nutrición de la humanidad", advirtió el Papa Francisco.
"En esta paradoja existen mecanismos de superficialidad, negligencia y egoísmo que están en la base de esta cultura del derroche. Si no se toma conciencia de esa dinámica y se pone límite, será difícil alcanzar los compromisos del Acuerdo de París sobre el cambio climático, y no se podrán lograr los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 de Naciones Unidas".
En ese sentido, insistió en que "llegar a esa meta no le corresponde sólo a los Organismos Internacionales ni a los Gobiernos, sino que compete a todos. La familia, la escuela, los medios de comunicación tienen una importante tarea en la educación y en la sensibilización".
"Nadie puede quedar al margen de la lucha contra esta cultura que va sofocando a tantas personas, especialmente a los pobres y vulnerables de la sociedad", aseguró.