MADRID,
Akash Bashir era un joven de 20 años, exalumno de la escuela "Don Bosco" de Lahore (Pakistán), que dio su vida por evitar que su iglesia sufriera un atentado el 15 de marzo de 2015.
Aunque han pasado ya cinco años de su trágica muerte, la memoria de este joven sigue presente en Youhannabad, Pakistán, y comienza a extenderse por el mundo entero.
Por eso, según informa Vatican News, la Archidiócesis de Lahore y los Salesianos han comenzado a recopilar testimonios de su vida ante la posibilidad de que se abra su causa de martirio. Hasta el momento, más de 20 personas de su parroquia, además de cristianos y musulmanes, han respondido a algunas preguntas sobre la vida de este joven al que conocieron.
En enero del 2017 el P. Francis Gulzar, párroco de la comunidad de Youhannabad, envió una carta al Arzobispo de Lahore, Mons. Francis Shaw, para pedir la apertura de la causa de martirio del joven.
Según precisó el P. Gulzar, "Akash tenía un amor grande por su Iglesia y con la fuerza del Espíritu Santo no pensó en salvar su propia vida. Akash murió en ese momento, pero salvó a muchos fieles con ese valiente acto de amor".
Entre los testimonios recogidos se destacan sus últimas palabras. Ya que cuando Akash saltó sobre el terrorista que pretendía explotar dentro del templo, le dijo: "Moriré, pero no te dejaré entrar en la iglesia".