En el contexto de las manifestaciones sociales en Chile, la Catedral de Valparaíso fue atacada dos veces en menos de una semana.
El primer ataque a la Catedral de Valparaíso ocurrió el 19 de octubre, en el contexto de las manifestaciones pacíficas realizadas por miles de personas, pero en las cuales también se filtraron grupos que buscaron generar caos destruyendo bienes públicos y privados.
Los desconocidos forzaron la reja y la puerta principal de la catedral. Luego le prendieron fuego y destrozaron algunas bancas del templo. Además, realizaron grafitis que aludieron a los escándalos de abuso sexual cometidos por algunos miembros de la Iglesia en Chile. Finalmente el fuego fue controlado.
De igual forma, el sábado 26 a eso de las 9:00 p.m. (hora local), cuando ya se había levantado el toque de queda para la ciudad, un grupo de manifestantes forzó la entrada principal del templo y robó algunas bancas para ser usadas como barricadas y hacer fogatas con ellas en las inmediaciones del lugar.
En el ataque también rompieron un bautisterio ubicado a la entrada del templo y apedrearon las ventanas.