Iglesia en Colombia y líderes provida rechazan proyecto para reglamentar aborto

"Y finalmente el ministro parece obviar que en Colombia el aborto es un delito que no tiene cárcel en tres casos excepcionales. Por lo tanto, es imposible legal y lógicamente pretender que una resolución del Ministerio de Salud le dé el carácter de derecho fundamental a un delito penal. Aún si la Corte Constitucional así lo afirma de manera irregular", detalló la CEC.

En otro punto de su carta, los obispos expusieron que el proyecto publicado "también pretende restringir el derecho a la objeción de conciencia de profesionales e instituciones cuyos objetivos y principios prefieren la conservación de las dos vidas antes que la muerte del indefenso".

"También es fuente de preocupación que se pretenda impedir la oración de personas que se reúnen frente a las clínicas abortistas para pedirle a Dios por el fin del aborto en Colombia y el mundo", añadieron.

Finalmente, los prelados colombianos indicaron que por las razones antes mencionadas "y muchas más", se "oponen a la expedición de la mencionada circular".

"Igualmente, hacemos un llamado a todo el pueblo de Dios para que manifieste públicamente su rechazo a esta reglamentación y utilice todos los medios a su alcance para expresar su opinión ante el Gobierno y la sociedad en general", concluyeron.

Por su parte, Jesús Magaña, presidente de la plataforma Unidos por la Vida de Colombia, expresó en un comunicado que el proyecto de resolución "es muy grave" y que "la Corte no puede crear derechos, ni puede legislar y por lo tanto el Ministerio de Salud no puede, como parte del poder ejecutivo del estado colombiano aceptar estas extralimitaciones".

También el Concejal de Bogotá, Marco Fidel Ramírez, conocido como el Concejal de la Familia, dijo en un comunicado que el proyecto de resolución para reglamentar el aborto "criminaliza a los defensores de la vida, traicionando así a la Colombia creyente que lo ayudó a elegir".

Además, aseguró que este proyecto "no solo es ilegal y favorece la mayor masacre de los no nacidos en la historia del país, sino que también es una persecución sistemática a padres de familia, organizaciones provida como 40 Días por la Vida y la Marcha por la Vida; a médicos, académicos, abogados, líderes políticos y de opinión, así como a pastores, sacerdotes y religiosas".

"Ahora resulta que quienes defendemos la vida de los niños en cualquier etapa de gestación y de las mujeres embarazadas seremos los criminales, por culpa de la extralimitación de la Corte Constitucional, del MinSalud y de la traición del presidente Duque a los cristianos que lo apoyamos. Esta reglamentación criminal es una estocada a la objeción de conciencia, a la patria potestad y a la familia como núcleo fundamental de la sociedad", añadió.

Este jueves 24 de octubre de 2019 cientos de ciudadanos participaron de un plantón frente al Ministerio de Salud colombiano para demostrar el rechazo de la ciudadanía al proyecto de resolución.