Tras el anuncio realizado por los Caballeros de Colón en agosto, en el que comprometió a asignar al menos 250 mil dólares para ayudar a los migrantes en la frontera de México y Estados Unidos, los líderes de Texas de esta organización anunció un esfuerzo conjunto con un consejo mexicano para socorrer a estas personas.
Terry Simonton, director superior de los Caballeros en Texas, informó que una caravana de Caballeros de Colón de Texas y México llegó el 5 de octubre a la "Casa del Migrante", un albergue en Ciudad Juárez, para entregar un camión con provisiones valoradas en 61 mil dólares, que incluían medicamentos, alimentos, agua, pañales y zapatos.
Esta iniciativa se suma a las acciones ya realizadas por los Caballeros en El Paso, que venían proporcionando suministros, cocinando y pagando por duchas alquiladas para los migrantes en la ciudad. Los Caballeros recibían donaciones para poder cubrir los mil quinientos dólares por día que costaba alquilar las duchas, explicó Simonton, ex diputado estatal en Texas.
En mayo, el diputado diocesano de los Caballeros en El Paso envió una solicitud por fondos adicionales por nueve mil dólares para poder adquirir sus propias duchas con calefacción portátil. La solicitud llegó hasta Simonton, quien habló con el Consejo Supremo de Connecticut, para apoyar con la mitad del costo de la compra.
"Les gustó la idea, pero cuando llegó a la mesa, el Caballero Supremo, Carl Anderson, dijo: 'Sí, tenemos que ayudar, pero debemos hacer más'. Y fue entonces cuando Anderson comenzó la iniciativa de ayudar a la frontera sur. Sin su visión, esto nunca hubiera sucedido", mencionó Simonton.
"Déjenme ser claro: No hay una declaración política", dijo Anderson en agosto. "Es una declaración de principios. Esto es sobre ayudar a las personas que necesitan de nosotros ahora. Y es natural y necesario la extensión de nuestro soporte a los refugiados alrededor del mundo".