El Tribunal de Apelación en Inglaterra determinó que una mujer discapacitada que está embarazada, reciba un dispositivo anticonceptivo inmediatamente después de su cesárea, informó la revista Premier Christianity.
La mujer de 24 años, que fue identificada en el Tribunal como AB, y su madre, "CD", son católicas devotas y miembros del pueblo Igbo. La mujer tiene una "moderada discapacidad de aprendizaje" y "exhibe un comportamiento y funciones desafiantes como de un niño de entre 6 a 9 años". También, se dice que AB tiene un trastorno del estado de ánimo, por lo que es medicada.
El fideicomiso del Servicio Nacional de Salud (NHS por sus siglas en inglés) pidió al hospital donde la mujer se atiende que se le instale un dispositivo anticonceptivo mientras esté bajo anestesia inmediatamente después del parto de su hijo.
Fiona Paterson, la abogada representante del fideicomiso del NHS, dijo a la corte que la mujer no volvería a estar interesada en concebir un hijo, además de ser vulnerable y no estar supervisada constantemente.
Pero la madre de la mujer, la trabajadora social que la asiste y su abogada, mencionaron que había un plan para proteger a la mujer y que tal interferencia en su autonomía no estaba justificada.
Susanna Rickard, la abogada de la mujer, dijo que las posibilidades de que AB estuviera expuesta a "más actividad sexual" eran "casi nulas". Mencionó que hay un plan para evitar que este en casa sola sin supervisión, o salga sin compañía.