Ordenan al primer sacerdote ciego en la historia de Trinidad y Tobago

En ese sentido, reconoció, "hemos criado a una generación de jóvenes que no entienden la Cruz de Jesucristo. Hemos pasado por una generación en la que nosotros, como sacerdotes, obispos, Iglesia, religiosos, no hemos puesto el centro de la Cruz de Cristo (…) porque hemos elegido las opciones blandas, porque hemos elegido la comodidad, el privilegio y el prestigio por encima del Evangelio de Jesucristo. Hemos ido al desierto como una Iglesia".

"La Iglesia o bien abrazará la Cruz como la fuente de su salvación, o la Iglesia será arrastrada a la Cruz en contra de su voluntad. Esta es la época en que la Cruz se vuelve central para toda la vida cristiana", acotó.

Más adelante, el Prelado se dirigió a los cuatro nuevos sacerdotes y les aconsejó que no hagan de la Misa una suerte de "entretenimiento".

"Hay una Misa y esa es la Misa de Jesucristo, y nosotros como sacerdotes participamos en este sacrificio que nos dio Cristo y eso es a lo que ustedes están llamados en el sacerdocio. Están siendo ordenados para ser hombres que levantarán la Cruz de Jesucristo en alto y comprenderán que no hay poder ni salvación excepto a través de la Cruz", aconsejó Mons. Gordon.

En un momento, el P. Trestrail aprovechó para agradecer a todos los asistentes de Trinidad y Tobago, así como de los países de Granada, República Dominicana, Curazao, Barbados, Dominica, Guyana, Surinam y Estados Unidos. 

Asimismo, estuvo muy agradecido en todo momento con los miembros de la comunidad de discapacitados que asistieron.

El domingo 15 de septiembre, el P. Trestrail celebró su primera Misa, acompañado de otros siete sacerdotes.