En la presentación del documento conclusivo del I sínodo diocesano de Comodoro Rivadavia, el Obispo del lugar, Mons. Joaquín Gimeno, asegura que el camino continúa con "cada uno según su vocación y misión" y con la guía del Espíritu Santo.
La afirmación es parte del documento conclusivo del primer sínodo diocesano que comenzó en 2017 y concluyó en junio de 2019. Las conclusiones fueron firmadas el 25 de julio y se presentaron el pasado 7 de septiembre.
El texto indica que las propuestas del sínodo se han elaborado sobre la base de la realidad social, cultural y religiosa de Argentina y "gracias a la Palabra de Dios, al Magisterio de la Iglesia, especialmente el del Papa Francisco".
Las propuestas son "señales de orientación y marco de actuación, criterios de espiritualidad diocesana, fuente de proyectos pastorales en todos los niveles, normas de comportamiento personal e institucional en nuestra Diócesis", describe el documento.
Para lograrlas "es imprescindible la cooperación de todos, si queremos hacer realidad en nuestra vida personal, en la vida de nuestras comunidades cristianas, movimientos, instituciones y en la vida de nuestra Iglesia diocesana, los principios y disposiciones del Sínodo", asegura.
En ese sentido, "la necesidad del 'nosotros', la necesidad de que cada uno de nosotros nos sintamos y seamos corresponsables de la puesta en marcha del sínodo en nuestra diócesis, cada uno desde donde esté en la Iglesia. Cada uno según su vocación y misión".