VATICANO,
El Papa Francisco invitó a los miembros de la Orden de San Agustín a mantener siempre el corazón dirigidos a Dios.
"Vuestros corazones tendidos hacia Dios. ¡Siempre! Cada miembro de la comunidad debe orientarse, como el primer 'propósito santo' de cada día, a la búsqueda de Dios, o a dejarse buscar por Dios", subrayó el Pontífice durante la audiencia que concedió este viernes 13 de septiembre en el Vaticano a los participantes del Capítulo General de la Orden, reunido en Roma.
El Santo Padre señaló que "la comunidad de consagrados son lugares en los que se quiere vivir la experiencia de Dios a partir de una fuerte interioridad y en comunión con los hermanos".
El Papa citó el principal desafío de los consagrados en el mundo de hoy: "Experimentar a Dios juntos para poder mostrar a este mundo a Dios de manera clara, valiente, sin compromiso y sin vacilaciones. ¡Es una gran responsabilidad!".
Invitó a los agustinianos a testimoniar una "caridad caliente, viva, visible, contagiosa de la Iglesia por medio de una vida de comunidad que manifieste clara ente la presencia del Resucitado y de su Espíritu. La unidad en la caridad es un punto central de la experiencia y de la espiritualidad de San Agustín, y un fundamento de toda la vida agustiniana".
"Mantener viva la llama de la caridad fraterna no será posible sin el 'in Deum'" de la Regla de San Agustín. "Es decir, 'en tensión hacia Dios'". "Este añadido a la expresión de los Hechos de los Apóstoles", explicó Francisco, "es propia de Agustín, para subrayar que es ese profundo dinamismo de vuestras comunidades, la primera gran fuente de la que brota todo vuestro servicio a la Iglesia y a la humanidad".