Durante el vuelo de retorno a Roma después de visitar África, el Papa Francisco advirtió de las consecuencias de la xenofobia, a la que definió como "una enfermedad humana" que ha ocasionado tragedias como la de Ruanda en 1994 y la cometida por el nazismo en el siglo pasado.
En la rueda de prensa que concedió este 10 de septiembre, el Santo Padre indicó que la xenofobia "no es solo un problema de África, es una enfermedad humana, como el sarampión. Es una enfermedad, te viene, entra en un país, entra en un continente".
"Y ponemos muros, ¿no? Y los muros dejan solos a los que los fabrican. Sí, dejan fuera a tanta gente, pero los que permanecen dentro de los muros se quedan solos, y al final de la historia derrotados por las invasiones poderosas".
"Pero la xenofobia es una enfermedad: una enfermedad 'justificable', entre comillas ¿no?, pero 'la pureza de la raza', por ejemplo, para nombrar una xenofobia del siglo pasado", indicó en referencia al nazismo y el exterminio de seis millones de judíos durante la Segunda Guerra Mundial.
El Papa también dijo que la xenofobia también está relacionada "con los considerados populismos políticos". En ese sentido, advirtió que "a veces siento en algunos discursos que se asemejan a los de Hitler en el 34. Se ve que hay un retorno en Europa, pero también en África".
"También ustedes en África tienen un problema cultural que deben resolver. Recuerdo que hablé en Kenia, el tribalismo. Ahí se necesita un trabajo de educación, de acercamiento entre las diversas tribus para hacer una nación", indicó.