Victoria,
El Arzobispo de Melbourne (Australia), Mons. Peter Comensoli, afirmó que preferirá ir a la cárcel antes que romper el secreto confesión, así lo anunció luego de que se presentó un nuevo proyecto de ley que obligaría a los sacerdotes del Estado de Victoria a reportar sospechas de abuso sexual infantil después de impartir el sacramento de la Confesión.
"Personalmente, guardaré el secreto", respondió el Arzobispo a ABC Radio Melbourne este miércoles 14 de agosto cuando se le preguntó si estaría dispuesto a quebrantar el sacramento. Inmediatamente después, ante la pregunta de si estaba preparado para ir a la cárcel, dijo: "Diré, en mi caso, que sí".
El miércoles 14, en horas de la mañana, el Parlamento de Victoria propuso el proyecto de ley que incluiría a los sacerdotes en las leyes de denuncia obligatoria en casos de abuso sexual infantil, sin ninguna excepción, inclusive para quienes imparten el sacramento de la Reconciliación.
Esta lista de "denuncia obligatoria" incluía a maestros, policías, médicos, enfermeras, consejeros escolares, trabajadores de la primera infancia y de justicia juvenil entre otros.
Mons. Comensoli dijo durante la entrevista que no consideraba como "mutuamente excluyentes" los principios de denunciar el abuso infantil y con el principio de respetar el sigilo sacramental.
"Sostengo el principio de informes obligatorios. También me aferro al principio del secreto de la confesión. Mi propia posición es que no veo eso como mutuamente excluyente", expresó.