REDACCION CENTRAL,
La nieta de Enrique Shaw, empresario argentino en proceso de beatificación, explicó que fue lo esencial y el origen del interés de su abuelo por vivir la fe católica desde el liderazgo empresarial.
En entrevista concedida a EWTN Noticias, Sara Critto Shaw explicó que cuando era joven, Enrique Shaw "leyó un manual de Doctrina Social de la Iglesia y allí decidió ir con todas sus fuerzas hacia Dios promoviendo el amor al prójimo".
"Él veía esta enseñanza de la Doctrina Social de la Iglesia, que favorece la promoción humana para que todos alcancemos dignamente la salvación en los quehaceres económicos y sociales, como una promoción del amor al prójimo y él quería mejorar las condiciones de los trabajadores. Desde joven fue su vocación", explicó.
Enrique Shaw, explicó su nieta, siendo joven "estaba todavía en la Marina de Guerra. Terminada la Segunda Guerra Mundial (en 1945), decidió renunciar y luego de pensar, de hacerse aconsejar, en lugar del deseo de trabajar como obrero aceptó esta posibilidad de hacer apostolado desde la empresa".
En sus declaraciones difundidas el 11 de julio, Sara Critto resaltó que quienes son católicos y hacen empresa deben buscar "santificarse a través de la profesión. Cuando se ve a los colaboradores humanos como alguien a quien hay que facilitar la realización se crea un buen clima de trabajo".
"Enrique se preguntaba si hemos sido más simpáticos con los empleados y se proponía ser como los demás necesitan que seamos. Él tenía como su 'socia consultora' a la Virgen María y procuraba ver con ella qué le gustaba a Jesús", comentó la nieta del siervo de Dios, durante una visita al Perú.