El presidente de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA), Mons. Óscar Ojea, destacó el "corazón de pastor" que tenía Mons. Léon Kalenga Badikebele, Nuncio Apostólico en el país que falleció el 12 de junio en Roma.
La Misa de exequias de Mons. Léon Kalenga fue presidida el 15 de junio por el Papa Francisco en la Basílica de San Pedro, en el Vaticano. A la ceremonia asistieron todos los nuncios del mundo que se encontraban en esos días reunidos con el Santo Padre.
En Argentina, decenas de obispos, sacerdotes, religiosos, diplomáticos, fieles, trabajadores de la Iglesia en Argentina y una delegación congoleña, participaron en una Eucaristía en memoria de Mons. Léon Kalenga.
Mons. Kalenga "poseía un verdadero corazón de pastor, se quedaba largamente después de las ceremonias con la gente sacándose fotos y por supuesto era el último en terminar", dijo el presidente de la CEA.
"En el breve lapso que estuvo con nosotros, el Nuncio Léon supo ganarse el afecto y el cariño de sus hermanos obispos, de sus colegas en el cuerpo diplomático y de gran parte del pueblo de Dios que lo pudo conocer", aseguró Mons. Ojea.
Además, "tenía la calidez propia del africano, nutrida en una experiencia honda de vida familiar y comunitaria, y al mismo tiempo su formación diplomática en la Santa Sede que había capitalizado con una inteligencia muy aguda".