CIUDAD DE MÉXICO,
Obispos y sacerdotes expresaron su dolor y oraciones, así como su pedido de justicia, tras el secuestro y asesinato de Norberto Ronquillo Hernández, joven estudiante de la Universidad del Pedregal.
Norberto fue secuestrado la noche del 4 de junio de este año al salir de las instalaciones de la Universidad del Pedregal. Su cuerpo sin vida fue encontrado la madrugada de este 10 de junio en el ayuntamiento de Xochimilco, en el sureste de Ciudad de México.
Las autoridades mexicanas, entre ellas la Procuraduría General de Justicia, han sido duramente criticadas por la presunta negligencia al llevar este caso.
En la Misa que celebró este 9 de junio por la reaparición del joven universitario en la parroquia del Espíritu Santo, en la alcaldía de Iztapalapa, el Cardenal Norberto Rivera, Arzobispo Emérito de México, lamentó que Ciudad de México vive "una situación muy difícil, en ocasiones insoportable".
"Cada día nuestra ciudad crece en esa violencia que va arrojando a sus habitantes hacia otras partes", lamentó.
"Esperamos en Dios que ilumine a todos aquellos que pueden trabajar en favor de la paz, que ilumine a todos aquellos que se han dejado corromper, que han tomado el camino de la violencia, que han tomado el camino de la muerte, que el Señor cambie, mueva sus corazones", expresó.