VATICANO,
El Papa Francisco nombró recientemente a dos nuevos Obispos Auxiliares para la diócesis de Santiago de Chile, uno de ellos, Mons. Alberto Lorenzelli, será ordenado por el mismo Santo Padre en la Basílica de San Pedro del Vaticano el próximo 22 de junio.
En entrevista concedida a EWTN Noticias y ACI Prensa, Mons. Lorenzelli abordó los desafíos que afrontará en su nuevo ministerio episcopal, entre ellos, las consecuencias de la crisis provocada por los casos de abusos sexuales cometidos por miembros de la Iglesia en Chile.
"Como Iglesia tenemos que ponernos al lado de las víctimas. El crimen cometido es muy grave y tenemos que acompañarlos. Muchos de ellos son creyentes y claro viven un momento de dificultad por lo que han vivido", expresó Mons. Lorenzelli.
En esta línea, el Obispo Auxiliar electo señaló que "las víctimas no son nuestros enemigos" sino que más bien "tenemos que agradecerles sobre todo a aquellos que fueron valientes, a levantar la voz para hacer ver los graves crímenes frente a los jóvenes, a los niños, por los cuales tenemos que tener un respeto particular".
"La cosa más valiosa que tienen las familias son sus hijos y cuando los confían a nosotros tenemos que saber con mucha claridad que tenemos el tesoro más grande que esta familia nos entrega", por lo que reiteró la importancia del respeto.
Asimismo, el sacerdote próximo por ser ordenado Obispo Auxiliar de Santiago de Chile reconoció que "claramente, muchas veces, no hemos respetado o visto de la manera justa el dolor, el clamor, que las víctimas presentaban porque es un dolor y un clamor que está fuertemente marcado en la carne, en el espíritu de estas personas. Y por eso, para ellos, el máximo respeto y la máxima colaboración".