El gobernador de Missouri (Estados Unidos), Mike Parson, promulgó el 24 de mayo una ley que prohíbe el aborto después de las ocho semanas, cuando es posible detectar los latidos del corazón del feto que está en el vientre de su madre.
"Al firmar este proyecto de ley hoy, estamos enviando una fuerte señal a la nación de que, en Missouri, defendemos la vida, protegemos la salud de las mujeres y abogamos por los no nacidos. Toda vida tiene valor y vale la pena protegerla", dijo Parson en su cuenta de Twitter tras firmar la ley.
Según la plataforma provida Live Action, la ley, conocida como "Ley de Missouri por los no nacidos" (House Bill 126), entrará en vigencia el próximo 28 de agosto. Ésta solo incluye excepciones cuando la vida de una madre está en peligro o ante daño permanente, pero no ante embarazos por violación o incesto.
Los médicos que practican abortos después de las ocho semanas podrían enfrentar entre 5 y 15 años de prisión, y perder permanentemente sus licencias profesionales. Por otro lado, las mujeres que se practican un aborto no estarían sujetas a un proceso judicial.
La ley prohíbe abortos por raza, sexo o diagnóstico de síndrome de Down. Además, prohíbe que esta práctica sea realizada a un menor de edad sin el consentimiento por escrito del menor y uno de sus padres o tutores legales. Antes de proporcionar el consentimiento, se debe notificar al otro padre del menor.
La nueva normativa de Missouri se suma a la de otros estados que tienen la esperanza de revocar el fallo Roe vs Wade, que legalizó el aborto en Estados Unidos el 22 de enero de 1973.