VATICANO,
El Papa Francisco alertó sobre "la tentación del eficientismo" a los más de 500 miembros de la confederación de Cáritas Internationalis reunidos en Roma para celebrar su XXI Asamblea General con el tema "Una familia humana, una casa común", inspirado en la encíclica Laudato Si.
La Misa de inauguración fue realizada en el altar de la Cátedra de la Basílica de San Pedro y fue presidida por el Pontífice junto al presidente de Cáritas Internationalis, Cardenal Luis Antonio Tagle, y numerosos obispos y sacerdotes del mundo.
En su homilía, el Santo Padre reflexionó en el pasaje de la lectura del día contenida en el libro de los Hechos de los Apóstoles en la que destacó tres elementos esenciales de la Iglesia en camino: "La humildad de la escucha, el carisma del estar juntos y la valentía de la renuncia".
"El Evangelio es nuestro programa de vida. Allí está todo. Nos enseña que las cuestiones no se enfrentan con la receta lista y que la fe no es una 'hoja de ruta', la fe es un camino, un camino para recorrer juntos, siempre juntos, con espíritu de confianza", afirmó el Papa.
En esta línea, el Pontífice preguntó: "¿Por qué Jesús no había dado reglas siempre claras y rápidamente resolutivas?", y alertó sobre la "tentación del eficientismo, del pensar que la Iglesia va bien si tiene todo bajo control, si vive sin 'sacudidas', con la agenda siempre en orden, todo regulado".
"Pero el Señor no procede así. De hecho, a los suyos desde el Cielo no envía una respuesta, no responde, sino que manda el Espíritu Santo. Y el Espíritu no trae el orden del día, sino que viene como fuego", explicó.