VATICANO,
Durante la Audiencia General de este 22 de mayo, el Papa Francisco concluyó con su serie de catequesis sobre la oración del Padre Nuestro en la que animó a los fieles presentes en la Plaza de San Pedro a rezar en cualquier situación pidiendo la asistencia del Espíritu Santo.
"El primer protagonista de toda oración cristiana es el Espíritu Santo. Nosotros no podremos nunca rezar sin la fuerza del Espíritu Santo. Es Él quien reza en nosotros y nos mueve a rezar bien. Podemos pedir al Espíritu que nos enseñe a rezar, porque Él es el protagonista, quien hace la verdadera oración en nosotros", explicó el Santo Padre.
En esta línea, el Pontífice señaló que el Espíritu Santo "sopla en el corazón de cada uno de nosotros, que somos discípulos de Jesús" y nos hace capaces de "rezar como hijos de Dios, quienes realmente somos por el Bautismo.
"El Espíritu nos hace rezar en el 'surco' que Jesús ha excavado en nosotros. Este es el misterio de la oración cristiana: por gracia estamos atraídos en aquel diálogo de amor de la Santísima Trinidad", afirmó.
Por otro lado, Francisco recordó que "la oración cristiana nace de la audacia de llamar a Dios con el nombre de Padre" y alentó también a pedir por "nuestros hermanos y hermanas en la humanidad, para que ninguno de ellos, los pobres especialmente, quede sin consuelo y sin una porción de amor".
"Esta es la raíz de la oración cristiana: decir 'Padre' a Dios. ¡Pero se necesita valentía! No se trata tanto de una fórmula, sino de una intimidad filial en cuanto somos introducidos por gracia: Jesús es el revelador del Padre y nos dona la familiaridad con Él", exclamó el Papa.